El gobernador de Connecticut (EE. UU.), Ned Lamont, firmó una ley que permitirá cometer abortos a personas que no sean médicos. Esto pondrá aún más en riesgo a las mujeres que cometen abortos, al permitir que participen en esos procedimientos personas que no son especialistas. A los promotores del aborto no les interesa proteger a las mujeres.
El miércoles 11 de mayo fue rechazado en el senado de EE. UU. un proyecto de ley para introducir el aborto a nivel federal. Un total de 50 republicanos votaron para bloquear la ley y a ellos se les unió Joe Manchin, senador demócrata. Es importante mantener protegidos ante la ley a la mujer embarazada y a su hijo, y evitar presiones que busquen imponer el aborto en las leyes.
La Comisión de Justicia del Congreso de Guerrero, México, aprobó un proyecto para despenalizar el aborto libre hasta las 12 semanas de gestación. Los tres diputados que votaron a favor del proyecto violaron el proceso parlamentario ya que convocaron a la sesión de forma irregular. En Guerrero se intenta imponer la despenalización del aborto de forma precipitada despreciando los procesos legislativos y la escucha del verdadero sentir de los ciudadanos.
En Estados Unidos es posible que la Corte Suprema revierta el fallo de Roe vs. Wade, el cual abrió la puerta al aborto en todo el país en 1973. Si esto sucede, se daría una motivación muy importante para la causa a favor de la vida en todo el continente. En México además motivaría a confiar en que es posible corregir una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Con el lamentable avance del aborto en México pareciera que en nuestro país hay ciudadanos de primera y de segunda clase: aquellos a los que se les dejó nacer, y los que no vieron la luz porque alguien más decidió que no debían venir a este mundo. A 15 años de la despenalización del aborto en la Ciudad de México, es penoso saber que a causa de este han perdido la vida antes de nacer por lo menos 237 643 mexicanos (cifras hasta junio de 2021). No puede ser un “servicio de salud” una medida que acaba con la vida de seres humanos indefensos y pone en riesgo la vida y la salud de las mujeres embarazadas.
América Rangel, diputada local del Congreso de la Ciudad de México por el PAN, presentó una iniciativa de ley para otorgar personalidad jurídica al hijo que se encuentra en el vientre de la madre. Es una buena noticia y genera esperanza conocer que se presenten iniciativas de ley a favor de la vida. Hoy en día es necesario realizar acciones concretas a favor de la protección del derecho a la vida ante la tendencia abortista en las leyes y la cultura.
El aborto es una política fallida. No hay evidencia que indique que su despenalización pueda tener algún efecto significativo sobre la disminución de la mortalidad materna. Lo que verdaderamente puede tener un impacto en esta variable es la inversión y estrategias para el cuidado de la salud materna. En este artículo hacemos un análisis sobre este tema.
El Congreso de Oklahoma (EE. UU.) aprobó la protección jurídica del no nacido en su órgano legislativo local. La reforma a la ley aprobada establece que la única causal que permitirá el aborto en el estado es cuando corra peligro la vida de la madre. Un punto importante de dicha reforma es que centra el incremento de la pena en la persona que ejecuta el aborto, no en la madre.
Desde hace unos años a la fecha en México hemos sido testigos de múltiples acciones en contra del derecho a la vida de los hijos antes de nacer. Como sociedad es nuestra responsabilidad formarnos para defender la protección del derecho a la vida con argumentos sólidos. Por ello, queremos compartirte una serie de conferencias que titulamos “El derecho a la vida: herramientas para su defensa”.
El gobierno izquierdista de España prepara una ley para forzar que haya médicos abortistas en todos los hospitales públicos, por ello ciudadanos llevaron a cabo una marcha en Madrid el 27 de marzo para protestar contra esta medida. Aunque el aborto ya está despenalizado en España, parece que el gobierno de ese país quiere imponer el que se extienda aún más su práctica, aunque hay pruebas de que muchos ciudadanos e incluso médicos, se oponen a él.