El lunes 24 de enero se transmitió a través de nuestras redes sociales la plática “Los derechos humanos: perspectiva jurídica” en la que nuestro director, Marcial Padilla, dialogó con el Dr. César Ruiz Jiménez, director de la Fundación Aguirre, Azuela, Chávez, Jáuregui Pro Derechos Humanos, y con el Dr. Rafael Estrada Michel, director académico del Instituto de Ciencia Jurídica. En este artículo te presentamos algunos puntos importantes que se abordaron en esta plática.

Antes de entrar en materia es importante que sepas que la Fundación Aguirre, Azuela, Chávez, Jáuregui Pro Derechos Humanos tiene como objetivo apoyar sin ningún fin de lucro, en todo aquello que implique la promoción, divulgación y protección de los derechos humanos. La fundación sostiene un aula llamada “Tiempo de derechos”, en donde se aborda todo lo relacionado con los derechos humanos fundamentales y aquellas circunstancias que los afectan. Además tratan  estos temas en una revista mensual con el mismo nombre que se emite de forma impresa y virtual. Esta última se puede consultar en la página https://www.tiempodederechos.mx/. Allí se encuentran los números anteriores y se pude tener acceso al aula virtual, donde se tienen conversatorios internacionales con expertos mexicanos y del extranjero. En la misma aula virtual se imparten talleres, conferencias y entrevistas.

La fundación ha establecido también el Instituto de Ciencia Jurídica que promueve cursos, siempre con la perspectiva de la dignidad humana y de derechos humanos fundamentales. “En febrero comenzamos con el Instituto de Ciencia Jurídica. Empezaremos con un diplomado en materia de derechos humanos dividido en siete módulos, donde las personas van a poder conocer la teoría general y tratados internacionales, medios de defensa nacional y algunas sentencias y casos prácticos”, comentó el Dr. César Ruiz.  

El Dr. César Ruiz Jiménez comentó que los iniciadores de la fundación comenzaron esta obra porque estaban convencidos de que los derechos humanos tienen un propósito, y ese propósito tiene en su raíz en que solo son valiosos en la medida en la que ayudan al mejoramiento  de la dignidad humana.

Ruiz subrayó la importancia de que las nuevas generaciones conozcan de manera más profunda los derechos humanos y sus implicaciones: “Es necesario que los jóvenes tengan un acercamiento más profundo y analítico a los derechos humanos. Vivimos en una época en la que es muy fácil llamarle derecho humano a cualquier prerrogativa o potestad que nos queremos dar y no nos detenemos a pensar si es realmente un derecho humano”. Añadió que no hay que perder de vista que una de las principales características de los derechos humanos es que son universales, y que nos corresponden a todos los seres humanos. “Nosotros creemos que si no tenemos presente esas características se pierde la brújula, y cualquier libertad, cualquier potestad que queremos en algún momento llamarla derecho humano, termina creando conflictos con verdaderos derechos fundamentales, y termina afectando a otro ser humano. Finalmente cuando se afecta a otro ser humano ya no podemos estar hablando de un derecho como tal, de un derecho fundamental al menos”.

Ya entrando más al tema de la plática, Marcial comentó que el tema de los derechos humanos es importante porque vemos que hay resoluciones de la Suprema Corte de Justicia, modificaciones a las leyes, algunos programas de gobierno, que se centran en los derechos humanos y muchas personas probablemente no entienden qué son, en qué consisten, qué contenido y alcance tienen. Preguntó a los invitados: ¿qué tan importante es hablar, reflexionar y profundizar en el tema de derechos humanos en el presente, en el 2022? ¿No deberíamos considerarlo un tema maduro en el país?, cuestionó.

El Dr. Rafael Estrada contestó: “Es desesperante que un tema que es tan elemental, tan evidente, no sea una prueba superada, como dices. Pareciera muy lógico que a nadie lo torturen, o que a nadie lo priven de la vida, o que a nadie lo limiten en su libertad de expresión o de conciencia. En todos los países del mundo y en algunos con mayor frecuencia, hay una especie de tara contraria a la garantía efectiva de los derechos fundamentales. En parte por lo que ya ha dicho César, porque cualquier prerrogativa que se coloque en un sitial superior por un legislador (por ejemplo) se convierte en un derecho fundamental, por eso luego nadie se toma en serio los derechos, esa es parte de la explicación”.

Por otro lado comentó también que hay un cinismo gubernamental. “La gente en los puestos de toma de decisiones entiende que hay temas que no tienen mucho atractivo electoral, que a nadie le importa por ejemplo la situación carcelaria. Pero como estas cuestiones no impactan en el momento inmediato de la toma de decisión electoral, pues no pasa nada por ejemplo, si no hay recursos efectivos para tutelar los derechos de las personas privadas de su libertad. Así hay muchos otros ejemplos”.

El problema, continuó explicando el Dr. Estrada, es que luego puede suceder que ya nadie se preocupe por derechos como el derecho al agua, al medio ambiente sano, a que se procesen las causas como deben ser procesadas, a que la dignidad humana sea irrestrictamente reconocida, y desde luego, se pueden pasar por alto derechos tan fundamentales como el derecho a la vida. Añadió: “Resulta que si no nos preocupamos por defender los derechos y las prerrogativas fundamentales de los otros, después vienen por nosotros, y no habrá nadie que levante la voz a favor nuestro”. Y puso ejemplos muy actuales: “Si no me preocupo por el tratamiento que se le da a los restos mortales de un bebé que es utilizado de la manera más indigna para probablemente el trasiego de estupefacientes, y que luego es arrojado al bote de la basura; o no me preocupo por los constantes asesinatos de comunicadores periodistas que desgraciadamente se viven en nuestro país, y como a mí no me va a afectar, ni siquiera toco el tema, ni en mis reuniones sociales, ni en mis redes sociales, ni con mis cuates. Pero si no me preocupo de eso, pues al rato no tengo derecho a quejarme de que vengan por mí y no haya nadie capaz de decir ‘oye cuidado con lo que le hacen a esta persona, cuidado con limitar su derecho a una debida defensa, cuidado con limitar su derecho a la libertad de expresión, cuidado con limitar su derecho a la objeción de conciencia’”.

Al respecto de este último tema, hizo referencia a la reciente resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que limitó la capacidad de las personas en la profesión médica de oponerse a realizar ciertas acciones, como por ejemplo, abortos. La corte le puso tantas restricciones a ese derecho que es ya prácticamente nulo.

A la pregunta de Marcial el Dr. César Ruiz comentó: “No está agotado (el tema de los derechos humanos) porque precisamente como no existe un conocimiento social claro de qué es un derecho, los tribunales están siendo objeto o vehículo para la imposición de ciertas agendas, que más que defender un derecho lo que están buscando es la imposición de una ideología o de un pensamiento. Eso se corrige de dos formas, estar atentos a las sentencias de los tribunales, sobre todo los tribunales que definen sobre derechos fundamentales, los tribunales del poder judicial de la federación, y también nosotros mismos pelear por nuestros derechos. Los derechos humanos no son más que letra muerta si nosotros no peleamos por ellos. Los derechos se conquistan. El primer paso es conocerlos y el segundo es luchar por su defensa ”.

El Dr. Ruiz añadió algo que como ciudadanos es fundamental de considerar: “Es muy importante que estemos atentos a lo que resuelvan los tribunales, porque finalmente son los que configuran el sistema de libertades que tenemos, y los que van limitando, delimitando o ampliando la protección de los derechos fundamentales. Y a veces hay que ser muy cuidadosos con la lectura de sus sentencias”. También hizo referencia a un caso reciente, que desde su perspectiva era muy sencillo, sobre la rectificación de las actas de nacimiento. Comenta: “En el caso en cuestión los tribunales deciden si dos personas que tienen dos actas de nacimiento pueden o no por errores en el registro, hacer uso de la segunda y no de la primera. La Suprema Corte termina haciendo un criterio que abre la puerta a que una persona, solo por su libre desarrollo de la personalidad, puede definir su propia edad, y eso atenta contra la seguridad jurídica, en un afán de tener una redacción muy progresista, o moderna de los derechos fundamentales. Y de todo ese tipo de cosas hay que estar atentos porque pueden llegar a trascender a la afectación de verdaderos derechos fundamentales. Imagínate un adulto que está obligado por una pensión, puede decir, no pues yo me considero un menor de edad, entonces ya no estoy obligado para una pensión”.

En la segunda parte de este artículo continuaremos comentando algunos aspectos que se abordaron en la plática sobre la reforma constitucional de derechos humanos que se hizo en el 2011.

Si te interesa ver esta charla completa puedes hacerlo en el siguiente enlace:

https://www.youtube.com/watch?v=OvOOhfQyrFU

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