Actualmente, como bien lo sabes, estamos ante la presencia de una pandemia mundial por la enfermedad denominada COVID-19. ¿Pero qué significa esto y qué repercusiones tiene en nuestra vida? Seguramente has recibido mucha
información al respecto pero vamos a conocer más esta situación para poder
actuar mejor. El 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS)
declaró que el COVID-19 es ya una pandemia [1]. Este virus ya ha llegado a
más de 114 países y según datos recopilados por la Universidad Johns
Hopkins, hasta el lunes 16 de marzo ha causado la muerte de 7,119
personas, ha habido 181,377 casos confirmados, y 78,085 personas se han
recuperado de la enfermedad [2].
Pero, ¿qué es el COVID-19? De acuerdo a la OMS es un virus que pertenece a la
familia de los coronavirus; causa enfermedades respiratorias que pueden ir desde
un resfriado hasta síndromes respiratorios más severos. Dicha enfermedad puede
contraerse por el contacto de persona a persona y los síntomas más comunes son
tos y fiebre. Hasta la fecha, no existe medicamento ni vacuna para curar o prevenir
este coronavirus. El COVID-19 inició en China en diciembre del año pasado provocando muchos enfermos y muertes, sin embargo, actualmente en dicho país
han disminuido considerablemente los casos reportados [3]. En los países donde
hay brotes, como México, es importante que se respeten las restricciones relativas
a viajes, desplazamientos y concentraciones de multitudes [4]. Pero hay países
como Italia [5] y España [6] donde el número de afectados por coronavirus ha
crecido excesivamente debido a la falta de precauciones y medidas oportunas por
parte de gobierno y ciudadanos, así como por el elevado número de ciudadanos
mayores de 60 años, quienes están en uno de los grupos más susceptibles de
contraerlo.
En el caso de México, sabemos que a pregunta expresa, el director general de la
OMS ha manifestado que es importante que además del sector salud, exista un
compromiso político del más alto nivel para evitar la propagación del coronavirus
[7]. No en todos hemos encontrado esa responsabilidad. Sin embargo, el hecho
de que una pandemia de esta magnitud se propague, no solo depende de las
medidas que tome o no tome el gobierno, sino de la conciencia cívica de los
ciudadanos y de estar bien informados.
¿Qué podemos hacer nosotros? Es muy importante seguir las
recomendaciones de la OMS que se han publicado constantemente a través
de los medios de comunicación. Entre las más importantes se encuentran:
●Lavarse las manos frecuentemente.
●Adoptar medidas de higiene respiratoria: al toser o estornudar, cubrirse la boca y la nariz con el codo flexionado o con un pañuelo.
●Mantener el distanciamiento social (1.5 metros mínimo).
●Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca. ●Solicitar atención médica en caso de fiebre, tos y dificultad para respirar. ●Mantenerse informado y seguir las recomendaciones de los profesionales de salud [8].
En zonas de propagación, además:
●Permanecer en casa si se siente mal.
●Si hay fiebre, tos y dificultad para respirar, buscar asesoramiento médico. ●Informar a su centro de salud sobre cualquier viaje que haya realizado recientemente [9].
Las medidas especiales implementadas en México son:
●Receso educativo del lunes 23 de marzo de 2020 al viernes 17 de abril de 2020*. ●Recomendación de aislamiento preventivo y otras medidas académicas relacionadas con el distanciamiento social por estar en el “punto óptimo de inflexión de la curva epidémica” [10].
Además de todo lo anterior, hay que acatar las medidas que ordene la autoridad competente y mantenerse al tanto de los comunicados que emita.
Desafortunadamente, hemos visto que en México muchas personas no han
seguido las recomendaciones arriba mencionadas y que en otros países se han
hecho, como la de permanecer en casa si no es necesario salir para evitar la
propagación del virus. Muchos ciudadanos minimizan el problema o consideran
que no se van a enfermar o que si lo hacen será levemente. Sin embargo,
debemos tener en cuenta que existen personas inmunocomprometidas por
determinada situación particular como la edad, alguna enfermedad
preexistente o condición genética que los puede orillar a ser más propensos
a adquirir el COVID-19 de forma grave. Por ejemplo, las personas mayores de
60 años, personas con alguna inmunodeficiencia, enfermos de cáncer o con alguna enfermedad crónica pulmonar o respiratoria, presión arterial alta, diabetes,
entre otras. Por eso, debemos tomar conciencia de que no solo se trata de
cuidarse uno mismo –con lo cual caeríamos en egoísmo-, sino que también
debemos cuidar de las personas que nos rodean. A todos nos toca poner de
nuestra parte para evitar más contagios. Esto se parece al efecto dominó: si
uno solo cae por falta de precauciones, puede hacer que caigan muchos
más.
En estos momentos debemos hacer un alto en el camino por el bien de la salud de
todos. Es tiempo de que una vez más los mexicanos demostremos que
estamos unidos para proteger a nuestros paisanos más necesitados. Ya nos
solidarizamos para rescatar a quienes fueron afectados por los terremotos que
sacudieron nuestro país en 1985 y 2017, ahora lo haremos para proteger a
quienes pueden tener más daños en su salud debido a esta pandemia.
ConParticipación
Fuentes:
Pandemia: según la Real Academia Española una pandemia es una enfermedad
epidémica que se extiende a muchos países o que ataca a casi todos los
individuos de una localidad o región.
[3]
mia-vo-requena-panorama-cnnee/
[6]
ara-controlar-la-pandemia/
[9] Ibíd.
*Esto es de acuerdo al comunicado número 3 emitido por el Sector Salud y la SEP el
14 de marzo de 2020. El receso educativo se extendió posteriormente hasta el día 30 de
abril de 2020.