El Parlamento de Francia aprobó una ley que incorpora como delito en el Código Penal la práctica de las mal llamadas “terapias de conversión”. Con esta ley, las personas o incluso los menores de edad que quieran recibir ayuda profesional ante una confusión sobre su identidad sexual, se verán impedidas de hacerlo. Los padres de familia no podrán intervenir si sus hijos menores de edad desean hacer una “transición de género” con el riesgo de que les sea quitada la patria potestad [1].

La iniciativa de ley fue propuesta por el partido político del presidente Emmanuel Macron. Quien viole el Código Penal podrá recibir una multa de 45 000 euros, 3 años de cárcel e incluso podría perder la patria potestad de sus hijos [2].

Numerosas protestas han surgido a raíz de la decisión tomada por el parlamento francés. La comunidad de médicos, psicólogos, psiquiatras y juristas se ha hecho oír a través de diversos comunicados y posicionamientos. Entre ellos resalta el comentario de la jurista Olivia Sarón, que menciona que con estas modificaciones a la ley, ahora no hay distinción entre menores y adultos. Las dificultades y alcances de los menores y adultos son muy diferentes y deben tratarse de acuerdo a sus necesidades [3].

Las solicitudes para realizar la llamada “transición de género” en menores han aumentado significativamente en Francia, desde el 2012 se ha multiplicado por 5 el número de casos. Los médicos quedan completamente desprotegidos con las modificaciones normativas ya que no podrán negarse a realizar procedimientos o tratamientos solicitados por menores para realizar la “transición de género”. Los psiquiatras y psicólogos no podrán evaluar si la solicitud del menor es lo más pertinente para el caso en específico, ni podrán tratar los casos de disforia de género [4].

El sector sanitario menciona que existe el riesgo de “encerrar a los jóvenes en una identidad que quizás no fuera más que la expresión de sus dificultades”. Actuar prematuramente sería un grave error.

Por último, la psicóloga Céline Masson menciona que este tipo de iniciativas perjudica la infancia y adolescencia de los niños y jóvenes pues implica la mercantilización del cuerpo de los niños, así como el robo de su infancia.

Es lamentable que este tipo de iniciativas se presenten y aprueben en los congresos y parlamentos de las naciones. Los padres tienen todo el derecho y obligación de acompañar y orientar a sus hijos en su desarrollo de identidad. Así mismo, la actividad profesional encargada de acompañar a niños y jóvenes en el desarrollo de su personalidad tiene necesariamente que cubrir todos los aspectos de la persona. La psicología es una ciencia necesaria para la detección y prevención de situaciones de riesgo.

ConParticipación

 [1] https://www.eldebate.com/religion/20220127/francia-quitara-patria-potestad-padres-opongan-cambio-sexo-hijos.html

[2]       Ibíd.

[3]       Ibíd.

[4]       Ibíd.