La Corte de Apelaciones en lo Penal de Texas suspendió la condena de pena de muerte para Melissa Lucio, tras la presentación de nueva evidencia y pruebas para el caso sobre la muerte de su hija, de la cual es acusada por homicidio. El tribunal de Apelaciones mencionó que en su decisión tuvo un peso importante el que varios miembros del jurado que condenó a la acusada en el año 2008, han declarado en público que no habrían decidido la pena de muerte si hubieran conocido todas las pruebas del caso [1].
Parte de la evidencia médica demuestra que la muerte de Mariah, la hija de Melissa, fue ocasionada por un accidente y no a causa de un homicidio. La directora de litigios especiales de la asociación Innocence Project, quien es abogada de la acusada, recalca que Melissa tiene derecho a un nuevo juicio justo. Asimismo, el embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, celebró la decisión de la corte. Con anterioridad al veredicto dicho funcionario había presentado una carta al gobernador de Texas, Greg Abbott, para pedir que se le concediera “clemencia ejecutiva” a Melissa Lucio. A este esfuerzo se sumó la embajada de Dinamarca en Estados Unidos [2].
El caso de Melissa Lucio refleja la necesidad de buscar justicia y reparación del daño, pero sin llegar a la medida extrema de la pena capital, que añade violencia a la cultura de muerte que se busca erradicar en la sociedad.
ConParticipación
[2] Ibíd.
