Algunos especialistas indican que, en nuestro país, la educación que se otorga a los niños y niñas en sus primeros cinco años de vida enfrenta muchos retos, como la falta de reconocimiento social. Dicho de otra forma, ni los padres ni los cuidadores reconocen la importancia de esta etapa para el desarrollo integral del ser humano [1].
Un grupo de especialistas participó en la mesa de discusión “Educación en la primera infancia; retos y recomendaciones”, organizada por la organización Early Institute a raíz de la información recopilada por el Sistema de Indicadores de Primera Infancia (SIPI México), una herramienta social y estadística que se utiliza para dar seguimiento a los Objetivos de Desarrollo Sostenible [2].
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) reportó que en 2018-2019, únicamente el 24.32 por cierto de niños y niñas de entre 3 y 4 años disfrutó de un desarrollo adecuado en materia de alfabetización y conocimientos numéricos, cifras que los expertos vinculan con aspectos como: necesidad de un cambio cultural, mejorar la calidad de la educación, fortalecer a los agentes educativos a través de la formación continua y adecuada, que los niños y las niñas estén en el centro de la construcción de las políticas públicas, entre otros factores [3].
Los números que arrojan las encuestas nos indican que hay mucho trabajo por hacer en torno al cuidado y desarrollo integral de la primera infancia. Son muchos los aspectos que hay que transformar, iniciando por un cambio cultural que lleve a otorgar el justo valor a esta etapa del desarrollo humano. Pidamos a nuestros gobernantes que se canalicen recursos para el cuidado de nuestros infantes, que se vean reflejados particularmente en la mejora de su salud y educación.
ConParticipación
Fuentes:
[2] Ibíd.
[3] Ibíd.