China modificó su política de control natal y ahora permite que las parejas puedan tener hasta tres hijos –en lugar de dos como era anteriormente la política–, esto como una medida que comience a resolver los problemas de envejecimiento de la población, según reportó un medio de comunicación afiliado al partido comunista Chino.

En China hubo muchos menos nacimientos el año pasado en comparación con otros: en 2020 solo nacieron 12 millones de hijos, en cambio, en 2016 nacieron 18 millones de bebés. Es probable que la baja en el número de nacimientos esté relacionada con el número de abortos. Según un informe de Radio Free Asia de 2020, se abortan un promedio de 8 millones de hijos en gestación “adicionales” en China cada año. La nueva política de tres hijos solo aplica para parejas, por lo cual los hijos de mujeres solteras y el cuarto hijo en las familias, serían abortados. 

El gobierno no tendría porqué controlar la cantidad de hijos que debiera tener una pareja o una mujer. La política de tres hijos implicaría mantener la llamada “policía de los vientres”, ya que con esa medida el gobierno podría continuar rastreando la fertilidad y nacimiento de las mujeres, y castigando a quienes tengan un embarazo considerado como “ilegal” [1].

Es preocupante la existencia y legitimación de políticas que pretenden controlar la población con medidas coercitivas, y que persiguen a las familias que tienen «hijos ilegales». La familia y sus decisiones no deben estar sujetas al control, coerción o presión del Estado. Además, cabe preguntarse si será suficiente esta medida ante el impacto cultural de la política del hijo único. 

ConParticipación

Fuente:

[1] https://www.lifesitenews.com/news/chinas-new-three-child-policy-womb-police-still-in-business