El 31 de julio de 2024 la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) publicó un comunicado en el que informaba que emitió la Recomendación 116/2024 al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) por un caso de violencia obstétrica en la Ciudad de México. El personal médico de la Clínica de Medicina Familiar Iztapalapa II y del Hospital General de la Delegación Regional Sur no proporcionaron una atención prenatal adecuada a una mujer embarazada, lo que resultó en la pérdida del hijo por nacer. La víctima experimentó dolor persistente, y a pesar de múltiples visitas y un ultrasonido privado, no recibió el nivel de atención necesario. Lamentablemente, en la última visita se le informó que el corazón de su bebé había dejado de latir [1].

La CNDH determinó que la atención médica deficiente que recibió la mujer es considerada violencia obstétrica, pues se vulneraron los derechos de la víctima a la salud, a una vida libre de violencia obstétrica y al acceso a información de salud. La CNDH recomendó al ISSSTE la reparación integral del daño, la colaboración en el seguimiento administrativo correspondiente y la impartición de cursos especializados en derechos humanos y salud materna para el personal médico involucrado [2].

La violencia obstétrica es un asunto urgente por resolver en México, especialmente en los centros de salud públicos.  Por diversos motivos, en estos centros la atención médica resulta deficiente y vulnera la dignidad de las mujeres y de sus hijos por nacer, dignidad que en ocasiones se ve afectada por ideologías antinatalistas en vez de buscar el bien de las beneficiarias. Trabajemos para que todas las mujeres puedan recibir atención médica de calidad.

ConParticipación

Fuentes:

[1] https://www.cndh.org.mx/sites/default/files/documentos/2024-07/COM_2024_223.pdf

[2] Ibíd.