De acuerdo con un nuevo análisis, un 34% de los niños que fueron sometidos a tratamientos con hormonas conocidas como bloqueadores de pubertad en la controvertida clínica “Tavistock Child Gender Clinic”, ubicada en Inglaterra, sufrieron problemas relacionados con su salud mental después de tomar el medicamento hormonal [1].
El año pasado, el Servicio Nacional de Salud (NHS) de Inglaterra ordenó que la clinica Tavistock y su controversial “Servicio de Desarrollo de Identidad de Género” cerrara sus puertas a partir de este año, sin embargo, el cierre se ha retrasado hasta marzo del año entrante. Un reporte independiente realizado por la Dra. Hillary Cass, encontró que los tratamientos ofrecidos no eran seguros o viables a largo plazo para los niños [2].
Es positivo que cada vez más expertos, médicos y la población en general tomen conciencia de la gravedad que involucran los medicamentos y cirugías para “cambio de sexo” en menores de edad. Los padres de familia deben tener las herramientas necesarias para atender de manera fiable la confusión de género de sus hijos y para que sea posible que logren salir de ella.
ConParticipación
Fuentes:
[1]
[2] Ibíd.
