En su último reporte sobre pandemia y migración la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) advirtió que la sociedad mexicana ha incorporado sentimientos discriminatorios, de exclusión social y xenofobia de una manera más acentuada hacia los trabajadores migrantes durante el tiempo de pandemia [1].
La OIM señaló: “Durante el brote de Covid-19, por ejemplo, se han visto episodios discriminatorios como el abuso físico y verbal, la negación de bienes y servicios, las restricciones y políticas de cuarentena discriminatorias y diferenciadas o la retórica política y discursos de redes sociales antimigrante” [2].
Al parecer estos sentimientos surgen porque las personas reaccionan a miedos y desafíos relacionados con el virus de la pandemia, y así construyen barreras contra las personas migrantes, ya que existe la falsa creencia de que ellas propagan la enfermedad o que pueden poner en riesgo la situación económica de México. La discriminación que sufren las personas migrantes ha llegado al punto en que llegan a ocultar el haber contraído el virus para evitar la discriminación y no buscar atención médica.
Uno de los desafíos que trajo la pandemia fue la acogida de numerosos migrantes, lo cual ha puesto a prueba la solidaridad de todos los mexicanos. Es necesario superar los temores y salir al encuentro de los demás.
ConParticipación
Fuentes:
[2] Ibíd.
