El Gobierno de Giorgia Meloni en Italia ha centrado su atención en la lucha contra el aborto. Una de sus propuestas ha sido otorgar 1 000 euros mensuales durante cinco años a las mujeres que elijan continuar con sus embarazos en lugar de abortar. Meloni aseguró que no derogará la ley de 1968 que tiene en rango de “derecho” al aborto, su meta es disminuir la cantidad de abortos anuales en Italia, que actualmente asciende a 60 000 [1].
En junio, Meloni logró que el comunicado final de la cumbre del G7 en Bari no incluyera una mención explícita sobre el aborto, a pesar de que se esperaba que los líderes reafirmaran su compromiso con los “derechos reproductivos” [2].
Esta medida se analiza en un contexto de emergencia nacional por la baja natalidad que pronostica un escenario dramático. Es sumamente positivo ver liderazgos como el de la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, que construyen un camino de oportunidades para que las mujeres embarazadas opten por la vida antes diversas situaciones de crisis durante la etapa de la gestación.
ConParticipación
Fuentes:
[2] Ibíd.
