En una nota de Milenio del 15 de agosto del presente año, se informó que en Hidalgo se ha observado un alarmante incremento en el consumo de cristal entre niños de quinto y sexto de primaria, especialmente en municipios como Pachuca, Mineral de la Reforma, Tizayuca, Tula de Allende, Tepeji del Río, entre otros. Esta droga, que se distribuye a través de dulces, está provocando graves efectos físicos y psicológicos en los menores. Instituciones como el Sipinna (Sistema Estatal de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes) están desarrollando políticas públicas para abordar esta situación [1].
Hidalgo encabeza a nivel nacional el consumo de anfetamina en cristal, con más de 600 personas atendidas este año, 300 de las cuales son menores de edad. Las autoridades han solicitado una alerta estatal para fortalecer la coordinación en la prevención y tratamiento del problema, y han exhortado a padres de familia y sociedad a involucrarse activamente [2].
Es preocupante conocer la incidencia de consumo de drogas —y en este caso drogas duras— en menores. Preocupa que el crimen se las ofrezca, y la impunidad. Tanto padres de familia, como educadores e instancias gubernamentales deben prestar atención y crear estrategias eficaces para prevenir e intervenir en el consumo de drogas.
ConParticipación
Fuentes:
[1] https://www.milenio.com/estados/consumo-de-cristal-en-hidalgo-identifican-casos-en-ninos-de-primaria
[2] Ibíd.
