economía

Con motivo del Día del Niño hicimos algunas reflexiones sobre la notoria disminución de las tasas de natalidad y fecundidad en el mundo. La consecuencia más preocupante es el invierno demográfico, que hace que disminuya la población y envejezca. Por otro lado, hoy se tiende a sugerir como “solución” al problema del medio ambiente el que las familias no tengan hijos. Pero los niños no son la causa del problema del daño al planeta. Los niños son la esperanza de este mundo y quienes nos enseñan a ser más humanos y más sencillos.

Se acerca el Día del Niño y queremos aprovechar esta ocasión para reflexionar sobre la disminución de las tasas de natalidad y fecundidad en el mundo. Los niños son una realidad en extinción; por diversos motivos vemos cómo se incentiva en la sociedad el tener menos hijos o no tenerlos. Pero la consecuencia de esto ya se está viendo: el invierno demográfico está afectando de manera importante la vida presente y futura de muchos países.