Ya te hablamos en el blog anterior de cómo el uso inadecuado del Internet puede significar riesgos para los menores de edad. En este blog continuaremos el tema. Comentábamos que entre estos riesgos está la aparición de adicciones, y uno de los más preocupantes es la adicción a la pornografía. 

Antonio Delgado, neuropsicólogo forense, señala que quien consume pornografía, aún y cuando no tenga una declarada adicción, puede experimentar incremento en la agresividad, ya que todo contenido pornográfico es violento; también puede caer en usar estereotipos que denigran a la mujer, o en conductas como el famoso “sexting” (envío de fotografías y/o videos de contenido íntimo por medios digitales). En los adultos ocasiona problemas en las relaciones de pareja, enfermedades de transmisión sexual, insatisfacciones, depresión, ansiedad, entre otros [1]. 

Es importante considerar que como cualquier otra adicción, la pornografía hace que el cerebro necesite cada vez más estímulos, pues no queda satisfecho y tiene un impulso cada vez mayor de estar conectado en sitios pornográficos [2]. Y esto es especialmente grave en un cerebro que está en desarrollo, como el de los niños y adolescentes. 

Algunos síntomas que ayudan a identificar cuando existe una adicción a la pornografía son [3]:

  • Búsqueda de páginas de Internet con pornografía de forma frecuente.
  • Ser sorprendido por padres, amigos o conocidos visitando estas páginas.
  • Tener constantes problemas de virus en los equipos debido a las visitas de páginas dudosas.
  • Preferir quedarse en casa en lugar de participar en actividades de ocio o recreativas.
  • Dedicar cada vez más horas frente a la computadora o celular.

Existen algunos otros factores de riesgo que pueden llevar a los menores a esta adicción [4]:

  • Problemas en la familia, escuela o en lo social. Ambientes negativos en el hogar, falta de educación sexual, problemas escolares y académicos o bien con amigos, predisponen a que la persona busque otros medios para evadir sus problemas, y esto lo puede llevar a caer en la pornografía.
  • Carencia de habilidades sociales. El tener problemas para relacionarse con personas de su edad es un factor importante en el desarrollo de un adolescente, por lo que la pornografía puede ser una “solución”, ya que solo ocupa de una computadora para conocer a otros, le ayuda a salir de su aislamiento.
  • Baja habilidad para regular sus emociones. Esto puede ser muy perjudicial para el sano bienestar psicológico de un adolescente. Este problema le puede conducir al consumo de pornografía para “ayudarle” a regular sus estados emocionales.
  • Otras patologías. TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), depresión, ansiedad, pueden llevar a la persona a ser impulsiva y necesitar disminuir estos síntomas mediante el consumo de pornografía.

Existen herramientas que ayudan a controlar el acceso de los menores a contenidos inapropiados protegiéndolos también de acosadores por Internet. También se pueden encontrar proveedores que ofrecen control parental, o bien, se pueden adquirir programas que ayuden a bloquear accesos a sitios además de limitar la información personal que se pueda compartir en línea [5].

Ahora hablaremos de qué tanta exposición a Internet tiene la población en México, y particularmente los menores de edad. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en colaboración con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) publicaron en febrero de 2020 los resultados de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2019.

Algunos de los resultados son [6]:

  • Hay 80.6 millones de mexicanos usan Internet, lo que representa el 70.1% de la población de entre seis años o más. Los resultados con respecto a 2018 van en aumento en un 4.3 puntos porcentuales (65.8%).
  • Los medios principales por los que los usuarios se conectan a Internet son los celulares inteligentes o Smartphone con un 95.3%, las computadoras portátiles con un 33.2% y las computadoras de escritorio con un 28.9%.
  • El 91.5% se conecta por entretenimiento, el 90.7% para recabar información y el 90.6 por ciento para comunicarse.
  • 44.3% de los hogares de México disponen de computadora y el 92.5% tienen al menos un televisor.
  • De los grupos de edad que usan Internet, el que tiene mayor proporción de usuarios es el grupo de 18 a 24 años, como se muestra a continuación:

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Como se observa, el uso del Internet se ha disparado en los últimos años en nuestro país, y la población más joven, entre ellos los adolescentes, es de las que más usa dicha herramienta. Esto trae sus riesgos como ya lo hemos mencionado. Por ejemplo, es común que en algunas redes sociales se publiquen ciertos retos a realizar por parte de los seguidores. Con frecuencia son precisamente los adolescentes quienes los realizan; lamentablemente muchos de esos retos son actividades riesgosas e incluso pueden ocasionar la muerte. Ante esto, la Fiscalía General de la República (FGR) a través de la Policía Federal Ministerial (PFM) emitió algunas recomendaciones al respecto para cuidar a los menores de edad. Estas son algunas medidas de prevención que se pueden implementar [7]:

  • Supervisar a los menores en todo momento sobre todo cuando están utilizando Internet o están en redes sociales.
  • No se les debe permitir hablar o establecer contacto con personas desconocidas por ningún medio.
  • Los dispositivos deben tener instaladas herramientas de control parental.
  • Abrir espacios de comunicación para explicarles los riesgos y peligros a los que pueden estar expuestos.

Como lo hemos indicado, el ciberacoso es también parte de las amenazas a las que se pueden enfrentar los menores de edad por lo tanto [8]:

  • Conoce las redes sociales que utilizan tus hijos y con quién se comunica.
  • Da seguimiento a los hábitos del uso de Internet de tus hijos.
  • Identifica cambios de ánimo o comportamientos que no sean normales tales como la ansiedad, temor, aislamiento o agresividad.

Quien sufre de un ciberacoso es afectado en las dimensiones emocional, mental y física, e incluso en casos extremos, puede llegar a atentar contra su vida. Por ello es importante que se forme un círculo de confianza en la familia basado en la comunicación. Los padres deben explicar a los menores que ante cualquier situación de acoso pueden acudir a ellos, y que hay profesionales que también pueden ayudarles en caso de necesitarlo [9].

Construyamos familias unidas en las que haya comunicación abierta y confianza. Esta se va formando en el día a día y los padres juegan un papel fundamental para crearla. Se necesitan padres presentes que se involucren en las actividades presenciales y en línea de sus hijos. Si eres padre de familia, acércate a tus hijos, dialoga y mantente cerca. Es tu responsabilidad el que tus hijos usen la tecnología de manera sana. Bríndales las herramientas y la seguridad necesarias para cuidarlos de caer en situaciones nocivas.

ConParticipación

Fuentes:

[1] https://www.europapress.es/andalucia/noticia-expertos-alertan-graves-consecuencias-consumo-pornografia-menores-piden-mecanismos-control-20220331175332.html

[2] https://lamenteesmaravillosa.com/entrevista-a-jorge-gutierrez-en-el-sexo-digital-nada-es-suficiente/

[3] https://www.daleunavuelta.org/wp-content/uploads/2022/01/DOPAMINA-2016-2021.pdf   Página 171

[4] Ibíd. Página 175

[5] https://kidshealth.org/es/parents/net-safety.html?ref=search

[6] https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/534908/ENDUTIH_2019.pdf

[7] https://www.gob.mx/fgr/prensa/comunicado-fgr-83-19-fgr-emite-recomendaciones-en-el-uso-de-plataforma-de-difusion-de-videos-por-internet-dirigidos-a-menores-de-edad

[8] https://www.gob.mx/profeco/es/articulos/grooming-y-ciberacoso-en-ninos?idiom=es

[9] Ibíd.