El Gobernador de Nuevo León, Samuel García, consideró como un paso importante que se haya aprobado en primera vuelta la «nueva» constitución del estado a través de una votación unánime conformada por las distintas fuerzas políticas del congreso local. García señaló que será la constitución más federalista, progresista y verde del país [1].
El primer mandatario de Nuevo León dijo que la parte más importante de este esfuerzo consiste en difundir ampliamente el texto con el fin de que los ciudadanos neoloneses den su opinión y aporten, para que luego grupos de expertos, mayormente doctores en Derecho, realicen el documento final, lo entreguen al Congreso del Estado, y sea sometido a la votación en segunda vuelta [2].
El mandatario destacó que la constitución que rige actualmente a Nuevo León es obsoleta y no atiende las necesidades actuales. Mencionó que es prioritario que la nueva constitución atienda la migración, los problemas del aire y agua, considere las energías renovables, y coloque en primer lugar a las mujeres, jóvenes y a la primera infancia. Comentó que esta será la constitución que guíe a Nuevo León en los próximos 50 años [3].
La propuesta de reforma a la constitución de Nuevo León debe ser una oportunidad para renovar los valores fundamentales que distinguen a esta entidad. Al mismo tiempo, se debe evitar que esta reforma sea usada como una herramienta de introducción de distorsiones ideológicas que puedan afectar a la sociedad, principalmente a la familia y a los niños.
ConParticipación
[2] Ibíd.
[3] Ibíd.
