En 2022 el Reino Unido registró un récord de 252 122 abortos en Inglaterra y Gales, un aumento del 17.34% en comparación con 2021. De estos, 251 377 fueron realizados a residentes locales, y se observó un incremento significativo en la reincidencia de abortos así como en los abortos en etapa tardía. Además, hubo un aumento notable en los abortos financiados por el Servicio Nacional de Salud (NHS por sus siglas en inglés) a través de proveedores privados, coincidiendo con el segundo año completo de funcionamiento de los servicios de aborto a domicilio. Este incremento en los abortos ha generado preocupaciones, ha llevado a algunos a cuestionar las políticas actuales y a pedir el restablecimiento de las consultas presenciales [1].

La portavoz de Right To Life UK, Catherine Robinson, calificó la cifra de abortos como una «tragedia nacional» y criticó la falta de apoyo a las mujeres con embarazos inesperados. Robinson y otros defensores provida han destacado que la mayoría de las mujeres en el Reino Unido apoyan cambios en las leyes de aborto, como la reducción del límite de tiempo y la prohibición del aborto selectivo por sexo. También han señalado que el 71% de las mujeres prefieren restablecer las consultas presenciales para evitar abortos tardíos autoadministrados, abogando por nuevas protecciones para los niños no nacidos y mayor apoyo para las mujeres embarazadas [2].

Estas cifras son verdaderamente alarmantes pues demuestran un sistema que está fallando en visibilizar la dignidad del hijo en gestación y en apoyar a las mujeres británicas ante embarazos inesperados. La tasa de población en Europa es críticamente baja y el número de abortos cometidos refuerza la crisis poblacional que enfrenta el continente europeo. 

ConParticipación

Fuentes:

[1] https://www.lifenews.com/2024/05/23/record-high-252122-babies-killed-in-abortions-in-uk/

[2] Ibíd.