Ahora que estamos celebrando que Nuevo León ha plasmado la protección del derecho a la vida en su Constitución y que se une a los otros 20 estados de la República que han hecho lo mismo, quisiera compartirte el testimonio de una mujer muy especial. Ella es Sofía Elizondo, tiene 21 años y nos cuenta que su madre sobrevivió a un aborto. Por esa razón, ahora ella se dedica a defender la vida desde la fecundación y a promover la adopción como la mejor alternativa para evitar que los y las bebés sean abortados.
Sofía nos dice: “Mi mamá es mi milagro favorito porque ella sobrevivió a un aborto. Mi abuelita le dijo a su mamá que estaba embarazada cuando tenía 18 años. Mi bisabuela le dijo que lo mejor era que abortara porque en ese momento no podía sostener económicamente al bebé que venía en camino. Mi bisabuela llevó a mi abuela a abortar cuando mi mamá tenía unos tres meses de gestación. El doctor le puso una inyección con solución salina para quemar a mi mamá viva en el vientre pero gracias a Dios, mi mamá sobrevivió a esa inyección. Por ese motivo, decidieron darla en adopción cuando naciera y así lo hicieron. Gracias a que mi mamá fue adoptada ¡yo existo! Y mis futuros hijos y nietos existirán«.
«Todos somos un milagro, toda vida merece ser vivida y tiene un gran propósito. Las personas no se dan cuenta de que cuando realizan un aborto, no solo matan al bebé que se espera, sino también a más generaciones que existirían si ese bebé viviera. Las consecuencias de un aborto son enormes. En mi caso, si mi mamá hubiera sido abortada, yo no hubiera nacido. Por eso, yo ahora me dedico a promover la adopción que es la mejor opción para todas aquellas mujeres que están decididas a abortar. Cuántas personas desean con todo su corazón tener ese bebé y darle la vida que se merece para amarlo, cuidarlo y protegerlo. La adopción busca lo mejor para todos. Nadie se arrepiente de elegir la vida pero muchos sí se arrepienten de no haberlo hecho”.
“Hace poco, mi mamá intentó buscar a su madre biológica y milagrosamente la encontró. Cuando mi mamá la contactó, mi abuelita biológica le dijo que no había un solo día en que no pensara en ella, que lo mejor que había podido hacer es haberla dado en adopción y que estaba muy agradecida de que no hubiera funcionado la inyección salina. Con esto me convencí aún más de que la adopción es el mejor camino para aquellas mujeres que quieren abortar, el testimonio de mi abuela biológica lo comprueba”.
Sigue comentándonos Sofía: “Mi mensaje para todas aquellas mujeres que me están leyendo y están considerando abortar es que son hermosas, ellas y sus bebés son un milagro, ambos merecen vivir. Si no puedes quedarte con tu bebé nadie te juzga, pero por favor no lo abortes, dalo en adopción. No seas la causante de detener a toda una generación solo porque no tienes apoyo o no sabes qué hacer. Recuerda que si mi mamá me hubiera abortado, yo no hubiera nacido, y si tú abortas tampoco nacerá la descendencia de tu bebé. Todos aquellos que están a favor del aborto tienen mi respeto y ya nacieron. Creo que nadie tiene derecho a decidir quién merece vivir y quién no”.
Así como Sofía, continuemos defendiendo el derecho a la vida. No juzguemos a las mujeres que desean abortar. Brindémosles nuestro apoyo y si aun así desean hacerlo, ofrezcámosles la adopción como la mejor alternativa. Respetemos la vida de todas las personas, desde la concepción y hasta su muerte natural. Si quieres seguir a Sofía, se encuentra en Instagram como confiasofia https://www.instagram.com/confiasofia/?hl=en
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