La Corte Suprema de Estados Unidos emitió una resolución por la cual detuvo la sentencia de un tribunal inferior que permitía que las píldoras abortivas pudieran ser distribuidas por correo durante la presente contingencia. Esto ocurrió en respuesta a una apelación que el gobierno de Donald Trump hizo sobre el tema. De esta manera, se puso como requisito que las mujeres acudan personalmente a un consultorio si quieren obtener las píldoras para cometer aborto [1].
Las píldoras para abortar conllevan riesgos serios para la salud de la mujer y eliminan la vida del hijo en gestación. Permitir su distribución por correo, arriesga aún más a las mujeres y a sus hijos pues significa que cualquiera podría tenerlas al alcance sin ningún tipo de supervisión médica.
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