Alumnos de la escuela secundaria Needham en Massachusetts, EE. UU., han denunciado que un profesor de biología les está enseñando, como parte de una unidad de la clase de genética, temas de identidad y expresión de género, así como sobre la “intersexualidad” [1].
Erika Sanzi, directora de Parents Defending Education, criticó que el profesor diera enseñanzas “inexactas” sobre el género, además desmintió las afirmaciones que el profesor hiciera a través de la clase a los alumnos. Expuso que: «Es ilógico implicar que una chica con más vello corporal es de alguna manera menos femenina que una con menos vello». Agregó: «La afirmación de que casi el 2% de la población es intersexual es absurda y deliberadamente engañosa: la cifra real es de 0.018%, o sea, aproximadamente uno de cada 5 000. Y tal vez lo más absurdo es la implicación de que el sexo biológico en los seres humanos es fluido, o que puede literalmente, cambiar, porque sucede en especies no humanas como el pez payaso y las ranas arborícolas» [2].
Acciones como las que realizó el profesor de biología son una clara imposición e influencia de la ideología de género. Las instituciones educativas deben formar a su alumnado en contenidos apegados a la ciencia científica y no promover argumentos ideológicos. Asimismo, deben comunicar a los padres de familia con claridad qué tipo de contenidos están enseñando a sus alumnos, en particular cuando se trata de temas sensibles, como los relacionados con la sexualidad.
ConParticipación
Fuentes:
[2] Ibíd.
