El pasado 2 de mayo el Congreso de Chiapas eliminó restricciones de tiempo para que las mujeres que queden embarazadas como resultado de una violación, puedan abortar después de 90 días [1].
Esta reforma incluye los casos de aquellas mujeres cuya vida corra peligro o de malformaciones del hijo en gestación [2]. Sin embargo, con esta medida el Congreso de Chiapas está pasando por alto que el aborto en sí mismo pone en riesgo a la mujer que lo comete, que todos los hijos en el vientre de su madre tienen derecho a la vida y no deberían sufrir discriminación por su condición.
Lamentablemente, esta modificación surge a razón de la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que declaró en julio de 2021 la inconstitucionalidad de las normas que indican un límite de tiempo para abortar en caso de embarazo por violación [3].
Es lamentable que el Congreso de Chiapas elimine el derecho a la vida de los hijos en el vientre de su madre, pues son personas y no merecen morir. Esto es consecuencia de una resolución de la Suprema Corte de Justicia, que igualmente interpretó que un hijo no merece vivir si su padre es un violador. Eso es un error. El derecho a la vida es fundamental. Valoremos y salvemos las dos vidas.
ConParticipación
Fuentes:
[2] Ibíd.
[3] Ibíd.
