Salma Luévano, funcionario que adoptó una identidad femenina y es diputado federal por el partido Morena, interpuso una queja ante la Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral (INE) contra el Frente Nacional por la Familia (FNF) y su presidente, Jorge Iván Cortés. El motivo de la queja establecido por Luévano es violencia política contra la mujer en razón de género [1].
La Comisión de Quejas del INE aceptó la queja y determinó que algunas publicaciones realizadas por el FNF “pueden generar una situación de discriminación” hacia Luévano, por ser un hombre que se siente mujer (una mujer trans, según la ideología de género) [2].
Es de extrañar que la persona que ocupa un escaño en la Cámara de Diputados se presente como víctima, dado que fue ella quien agredió a la población creyente al amenazar con cárcel a ministros de culto por predicar su fe, y fue ella también quien ridiculizó la fe al vestirse de clérigo. Además, no compete al INE pronunciarse en un tema que involucra la libertad de expresión de una organización social que no es partido político.
ConParticipación
Fuentes:
[2] Ibíd.
