Entre 2020 y 2021 hubo un recorte de 66 por ciento en el presupuesto federal para la salud materna y perinatal, es decir, los servicios de salud a mujeres durante el embarazo, el parto y puerperio fueron afectados. Esto se realizó aún y cuando debido a la pandemia se elevó la muerte materna “a razón de 32.4 defunciones por cada 100 mil nacimientos en 2019, a 52.1 en 2021” [1].
Por otro lado, el gobierno federal también “restringió 53 por ciento el monto destinado a prevención y control del cáncer de mama y cervicouterino; 46 por ciento el utilizado para prevenir y atender la violencia familiar y de género, y 31 por ciento el empleado para programas de igualdad de género en salud” [2]. Sin embargo, el recorte presupuestal más severo fue en el rubro de salud materna, que en el 2019 tenía destinados 1 692 millones de pesos, y se disminuyó a 516 millones en este año. Dichos fondos estaban dirigidos a programas para reducir la morbilidad y mortalidad materna [3].
Es lamentable que se disminuyeran los recursos destinados a la atención de la salud propia de las mujeres y, por otra parte, se dé prioridad a proveer el aborto en las instituciones públicas de salud. El aborto elimina la vida del hijo en gestación y somete a las mujeres a los riesgos implícitos en dicho procedimiento.
ConParticipación
Fuentes:
[1] https://laotraopinion.com.mx/4t-recorta-severamente-presupuesto-destinado-a-salud-materna/
[2] Ibíd.
[3] Ibíd.