Últimamente hemos oído hablar con cada vez más frecuencia del tema de la transexualidad. Se comenta en los medios de comunicación o en las redes sociales que las personas transexuales son como cualquier otra persona, y se denuncia que muchas veces son atacadas física o verbalmente, o que se les discrimina. También se dice que tienen derechos como todos los demás y que deben ser tratadas según el sexo con el cual se perciben a sí mismas (sin importar su sexo biológico).

Es cierto que las personas transexuales son seres humanos como todos, y que también tienen derechos. Sin embargo, en este último punto surgen algunos malos entendidos, porque se empiezan a considerar “derechos” situaciones que no son tales, o que imponen sobre los demás ideas con las que no todos estaríamos de acuerdo, y en casos extremos, que invaden los derechos de terceros.

Tal es el caso de una persona transexual que se hace llamar Lia Thomas (su nombre de nacimiento es William Thomas), un nadador norteamericano y estudiante de la Universidad de Pensilvania. Empezó a formar parte del equipo varonil de natación de su universidad en 2017, y poco a poco empezó a participar en competencias y en varias pruebas sin sobresalir. En el 2019 comenzó su “transición” y a tomar terapia hormonal [1]. En el ciclo escolar 2021-2022 se integró al equipo femenil de su universidad y comenzó a destacar en competencias en dicha categoría, entre ellas ganó un importante campeonato el pasado 17 de marzo [2]. Esto ha traído mucha controversia porque tanto padres de familia de las nadadoras del equipo de la Universidad de Pensilvania, como otros actores sociales y políticos, afirman que no debería competir contra mujeres pues Will (Lia) tiene una ventaja sobre ellas.

No es el primer caso que conocemos sobre competencia deportiva injusta que está quitándole espacios de desarrollo a las mujeres. Y es que hay que reconocer que si se toman como referencia otros casos similares y estudios, y se analiza la anatomía de los hombres y de las mujeres, se puede decir desde la ciencia que el cuerpo de un hombre que se siente mujer (“mujer transexual” según la ideología de género) no podrá ser equiparado nunca al de una mujer.

Para hablar de este tema, Alison González, de nuestro equipo de ConParticipación, conversó con el Dr. Samuel Saad, con el fin de conocer a fondo las diferencias biológicas entre hombres y mujeres, cómo es su anatomía, genética y sistema gonadal, así como para comprender los casos polémicos de participación de personas transexuales (concretamente hombres que se sienten mujeres) en las competencias deportivas exclusivas para mujeres.

El Dr. Samuel inició la entrevista platicando sobre la campeona mundial y olímpica en 100 metros planos Tori Bowie, quien logró el récord en 10.78 segundos en 2017. Para comprender las diferencias biológicas que existen entre hombres y mujeres sirve considerar que hay 15 000 hombres que han logrado el mismo récord que la campeona mundial, y de ellos, 124 eran jóvenes adolescentes. Este hecho muestra que los hombres y las mujeres tenemos grandes diferencias biológicas que hacen que el desempeño de uno sea muy distinto al del otro [3].

Por si este caso no hubiera sido suficiente para comprender las diferencias biológicas, el Dr. Samuel narró igualmente la ocasión cuando el equipo élite de fútbol femenino de EE. UU. se enfrentó en partido amistoso con el equipo de fútbol varonil FC Dallas de la sub 15 (jugadores de 15 años) del mismo país. El resultado fue contundente, el equipo varonil ganó significativamente [4].

Estos dos ejemplos no buscan colocar a los hombres como mejores deportistas, ni buscan hacer insignificante el rendimiento atlético de las mujeres, simplemente demuestran que existen diferencias biológicas significativas que colocan en competencia injusta a las mujeres ante competencias contra hombres. Por ello, el caso de Lia Thomas ha sido tan polémico.

Los deportes femeninos se establecieron para la competencia exclusiva de mujeres. En ellos se busca que el desarrollo y progreso en el deporte sea a través de los méritos y récords que ellas mismas logren para su categoría. Un dato interesante que mencionó el Dr. Samuel es que según un estudio que compara el desempeño atlético de hombres y mujeres deportistas de élite, existe un promedio de entre 10-12% de mejor desempeño en los atletas varones [5].

Diferencias biológicas entre hombres y mujeres

Nuestro entrevistado explicó que los hombres tienen una mayor capacidad aeróbica máxima, mayor masa muscular, menor grasa corporal, huesos más gruesos y en promedio son 12-15 centímetros más altos que las mujeres. Estas características hacen que los hombres tengan mayor capacidad para realizar ejercicios de fuerza que requieren movimientos explosivos [6].

El Dr. Saad señaló que las mujeres, por el contrario, tienen una distribución ginecoidea de la grasa que modifica el centro de gravedad de su cuerpo, así como en su masa muscular tienen mayor cantidad de fibra tipo 1, lo que permite que tengan mayor habilidad para ejercicios que requieren mayor resistencia. Asimismo, el ángulo Q que se forma entre los cuádriceps con la rodilla es más grande en las mujeres por tener la pelvis más ancha. Esta condición en su cuerpo modifica su desempeño deportivo [7].

En cuanto a la capacidad pulmonar entre hombres y mujeres, el Dr. Saad nos explicó que en los hombres es mayor debido a que tienen más volumen pulmonar y vías aéreas más gruesas. En otras palabras, los hombres requieren menor esfuerzo para oxigenar sus músculos que las mujeres.

Personas transgénero

Cuando una persona se somete a terapias hormonales para “cambiar de sexo”, realmente los cambios que sufre el cuerpo son en los niveles gonadales (hormonales), sin embargo, estos cambios no son significativos para que una persona pueda ser considerada del otro sexo, pues desde el punto de vista genético, todas su células siguen siendo XX o XY, según el sexo que sea. Asimismo los caracteres sexuales secundarios que se expresan en todo el cuerpo, como la distribución de la masa muscular, los niveles de grasa y la estructura ósea, tampoco se pueden modificar significativamente.

El Comité Olímpico Internacional (COI) ha dado pautas para la participación de personas transgénero en las competencias deportivas. Algunas de ellas son [8]:

● 4 años de identificarse como el sexo opuesto.

● Someterse a terapia hormonal, y en el caso de hombres que se sienten mujeres (“mujeres transexuales” según la ideología de género), dejar pasar 12 meses de terapia para participar en competencias.

Aunque el COI haya establecido estas reglas, las competencias seguirán siendo injustas debido a que la anatomía y estructura biológica de los hombres son muy diferentes a los de las mujeres. Lo que se modifica está solamente en el plano hormonal y no es suficiente para equiparar el cuerpo de un hombre con el de una mujer. La densidad ósea sigue siendo la misma, la masa muscular aunque se pueda reducir o aumentar sigue teniendo las características del sexo correspondiente.

El caso de Lia Thomas es un caso de competencia injusta, pues está logrando récords y méritos en competencias femeninas con las ventajas biológicas de un hombre. Con esto usurpa un lugar que solo le corresponde a las mujeres. Es nuestro deber proteger los espacios exclusivos para el desarrollo y crecimiento de las mujeres.

ConParticipación

Fuentes:

[1] https://www.infobae.com/america/deportes/2021/12/29/la-historia-de-la-nadadora-transexual-lia-thomas-que-bate-records-y-abrio-el-debate-en-estados-unidos/

[2] https://www.bbc.com/mundo/noticias-60821813

[3] Estudio: https://law.duke.edu/sports/sex-sport/comparative-athletic-performance/

[4] Partido USWNT Vs. FC Dallas Under 15 https://www.cbssports.com/soccer/news/a-dallas-fc-under-15-boys-squad-beat-the-u-s-womens-national-team-in-a-scrimmage/

[5] Estudio: https://law.duke.edu/sports/sex-sport/comparative-athletic-performance/

[6] Diferencias físicas entre hombres y mujeres https://athletescan.com/sites/default/files/images/do-transitioned-athletes-compete-at-an-advantage-or-disadvantage-as-compared-with-physically-born-men-and-women-a-review-of-the-scientific-literature2.pdf

[7] Ibíd.

[8] Políticas de competencia Comité Olímpico Internacional: ​​https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5357259/