El abuso de alcohol y el consumo de tabaco representan un grave riesgo para la salud. En un artículo anterior te comentaba sobre la adicción a los videojuegos. El experto en el tema al que consultamos, Armando Duarte, nos mencionaba que esta adicción en los niños puede ser el inicio para formar otras adicciones en la adolescencia o juventud que incluyan alguna sustancia como el alcohol o el tabaco. Esto se debe a que el uso excesivo de los videojuegos podría ser un indicador de bajo autocontrol en la persona, lo cual se podría manifestar en otros aspectos o dimensiones de su vida.

Antes de ahondar en el tema del tabaco y el alcohol conviene recordar qué es una adicción. Según la Secretaría de Salud es una enfermedad crónica del cerebro, a menudo con recaídas, a pesar de las consecuencias nocivas para la persona y para las que le rodean. Si bien es cierto que en el caso de la mayoría de las personas la decisión inicial de consumir drogas es voluntaria, con el tiempo los cambios que ocurren en su cerebro pueden afectar el autocontrol y no pueden resistir los impulsos intensos de consumir drogas” [1]. Como vemos la adicción se define como una enfermedad del cerebro; lamentablemente esta información no es tan conocida y quizá por ello no se hace una toma de conciencia más seria sobre los efectos que el abuso de sustancias puede ocasionar en la salud. Para los jóvenes en particular, tomar y fumar son una cuestión de diversión, sin embargo, muchos no saben o no se detienen a pensar en las consecuencias que puede ocasionarles abusar del alcohol y el tabaco.

Existen estadísticas muy preocupantes relacionadas, por ejemplo, con el abuso del alcohol en los jóvenes. Según un reporte de la CONADIC (Comisión Nacional contra las Adicciones) y de acuerdo con el Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (CONAPRA), el impacto del Uso Nocivo del Alcohol se refleja en los siguientes datos: a nivel nacional, el 50% de los accidentes de tránsito están relacionados con el abuso de alcohol. La primera causa de muerte en jóvenes en México son los accidentes automovilísticos, el 52% de éstos se encontraban bajo los efectos del alcohol u otra droga. Los accidentes de automotor y riñas representan la segunda causa de invalidez total y parcial en jóvenes, más de la mitad de estos se produjeron bajo los efectos de alguna droga. La mortalidad asociada a los hechos de tránsito relacionados al consumo de alcohol es alta, ya que anualmente perecen 10,000 personas y otras 25,000 resultan discapacitadas [2].

Como ves, las cifras son alarmantes. Y es que tanto el alcohol como el tabaco actúan sobre el sistema nervioso central, esto quiere decir que alteran su funcionamiento provocando una sensación momentánea de relajación o placer, pero en dosis elevadas pueden ocasionar daños graves. Muchas personas buscan estas sensaciones sin poder limitar el consumo de la sustancia por falta de autocontrol, sin que se conozca a ciencia cierta por qué hay personas que pueden detenerse y otras no [3]. De acuerdo con la Secretaría de Salud, el alcohol y el tabaco, aunque son sustancias permitidas para mayores de 18 años, son consideradas drogas debido a que, como ya mencionamos, alteran el sistema nervioso central, además de que tienen propiedades adictivas y son las que provocan mayores daños en la salud de las personas en todo el mundo [4].

Hablando más específicamente sobre los efectos de estas sustancias, el alcohol provoca liberación de endorfinas [5], causando inicialmente una sensación de euforia y desinhibición, pero afecta progresivamente las funciones cerebrales [6]. Por su parte, el tabaco provoca que se libere epinefrina o adrenalina y aumente la presión arterial, que generalmente se libera para combatir situaciones de riesgo. También, de acuerdo con estudios que se han realizado: “Al igual que sucede con drogas como la cocaína y la heroína, la nicotina aumenta los niveles del neurotransmisor químico llamado dopamina, el cual afecta partes del cerebro que controlan la satisfacción y el placer” [7].

Además, los daños que provocan estas sustancias en los adolescentes son mucho más dañinos que en los adultos debido a que su cerebro aún se encuentra en desarrollo y puede impedir su maduración completa. Al respecto la Secretaría de Salud menciona: El cerebro de las y los adolescentes está en crecimiento. En esta etapa aumenta la cantidad de conexiones entre sus neuronas; el alcohol, el tabaco y otras drogas pueden interferir en el desarrollo de las mismas, afectando la forma en que madura su cerebro [8].

Como te decía, es difícil saber qué personas están propensas a formar adicciones y quiénes no. Lo que es un hecho es que hay sustancias socialmente aceptadas, como el alcohol y el tabaco, que pueden crear adicción por los efectos de placer en el cerebro. Por ello es importante actuar y prevenir situaciones de riesgo en nuestros hijos. Es fundamental que desde niños se inculquen hábitos y se pongan límites en cuanto al uso de medios de entretenimiento –tal como el uso de videojuegos, ver televisión o videos, etc.– o el consumo de sustancias que produzcan placer y evasión de la realidad. Nadie mejor que los padres de familia para formar hábitos en sus hijos; dichos hábitos pueden ser una medida de prevención que les puede ayudar a tener autocontrol y dominio de sí en la edad adulta. Cuidemos a nuestros hijos y estemos cerca de ellos.

ConParticipación

 

Fuentes:

[1] http://www.conadic.salud.gob.mx/Guia_Preventivas/Hablemos.pdf

[2] http://www.conadic.salud.gob.mx/pdfs/informe_alcohol.pdf 

[3] https://www.bbc.com/mundo/noticias/2012/01/120111_alcohol_cerebro_adiccion_men 

[4] http://www.conadic.salud.gob.mx/Guia_Preventivas/Hablemos.pdf
[5] https://www.bbc.com/mundo/noticias/2012/01/120111_alcohol_cerebro_adiccion_men
[6] http://www.pnsd.mscbs.gob.es/ciudadanos/informacion/alcohol/home.htm
[7] https://www.drugabuse.gov/es/publicaciones/drugfacts/cigarrillos-y-otros-productos-con-tabaco
[8] http://www.conadic.salud.gob.mx/Guia_Preventivas/Hablemos.pdf