Ha concluido la jornada electoral 2021. La noche del domingo 6 de junio el Instituto Estatal Electoral (INE) a través del conteo rápido reportó que hubo una participación ciudadana de entre el 51.7% y 52.5% de la lista nominal de 93 millones 528 mil 473 [1]. Es una de las participaciones más altas en la historia de las elecciones de nuestro país. En este sentido podemos sentirnos orgullosos porque los ciudadanos demostraron que la democracia en México es importante para ellos y lo probaron saliendo a votar.
Ahora comienza nuestro trabajo como ciudadanos para velar porque nuestro voto rinda los frutos esperados. Recordemos que la agenda ciudadana o social es propuesta de nosotros, los ciudadanos, y por consiguiente, es de nuestro interés que se implemente. El tener un puesto de elección popular consiste en velar por el bienestar de los mexicanos, y no debe ser usado como una plataforma para imponer intereses particulares. Por ello, debemos estar atentos y monitorear a los gobernantes electos para conocer cuál es su plan de trabajo. De esta manera podremos alzar la voz o tomar acciones oportunas si observamos que pretendieran actuar en forma contraria a nuestros intereses, sobre todo en lo que se refiere a valores fundamentales como el derecho a la vida y el bienestar de la familia.
Los primeros resultados de la elección que arroja el INE a través del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) a nivel federal son los siguientes [2]:
• Diputados federales:
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Hay que aclarar que la tabla anterior muestra únicamente las diputaciones por mayoría relativa (300 diputaciones).
El conteo rápido hasta el domingo 6 de junio a las 22:23 horas, estimaba que la Cámara de Diputados tendría la siguiente conformación [3]:
PAN de 106 a 117 diputados,
PRI de 63 a 75,
PRD, de 12 a 21,
MC, de 20 a 27,
Morena podría tener entre 190 y 203,
PVEM, de 40 a 48,
PT, de 35 a 41,
PES, de 0 a 6,
RSP, Fuerza por México, así como independientes, no alcanzarían ninguna.
• Gobernadores:
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La nueva composición del congreso federal pone delante de nosotros varios escenarios y varios retos. Recordemos que hay tres tipos de mayorías en las cámaras [4]:
- La mayoría calificada, compuesta por 2/3 partes de los legisladores presentes. En el caso de la Cámara de Diputados, compuesta por 500 legisladores, la mayoría calificada sería de 334 votos, o un número menor, según el total de los diputados presentes en la sesión.
- La mayoría absoluta, que requiere tener la mitad más uno del total de los diputados (251 o más).
- Y la mayoría simple, que es la mitad más uno de alguna votación en la que no estén todos los diputados (o el mayor número de votos de los diputados presentes en la sesión en cuestión).
Este tipo de mayorías en el congreso nos coloca, además, delante de varios escenarios:
- Escenario a. Si un solo grupo obtiene por sí mismo o con sus aliados la mayoría calificada, podría cambiar la constitución sin necesidad de negociar con las demás fuerzas políticas, además podría sacar adelante cualquier ley que proponga. También podría aprobar el presupuesto sin negociar ningún cambio.
- Escenario b. Si un grupo político y sus aliados obtienen la mayoría absoluta pero no llegan a la mayoría calificada, podrían sacar adelante las leyes y el presupuesto sin negociar, pero no podrían modificar la constitución. Este es el escenario en el que nos encontraríamos hasta el momento. De acuerdo con el conteo rápido del INE, el partido Morena -que ahora tiene la mayoría en el congreso federal- no tendría la mayoría calificada en la Cámara de Diputados, pues solo alcanzaría de 190 a 203 diputaciones. Aún si contara con el apoyo de sus partidos aliados, no la alcanzaría, ya que el Partido Verde tendría de 40 a 48 diputaciones, el PT de 35 a 41 y el PES máximo 6. Como máximo, la alianza Morena-Verde-PT-PES sumaría 298 diputaciones y para la mayoría calificada se requieren 334. De modo que sí pueden aprobar leyes, los impuestos federales y el presupuesto federal de egresos, pero no podrían modificar la constitución.
- Escenario c. Ningún grupo logra por sí solo la mayoría, y eso forzaría a todos a sentarse a dialogar y negociar las leyes, el presupuesto y los cambios a la constitución.
Ahora bien, ante los escenarios que te acabamos de exponer, nos enfrentamos a los siguientes retos:
- No solo frenar los intentos de arrebatar el derecho a la vida e imponer el aborto, sino incluso tenemos el reto de introducir leyes que refuercen ese derecho fundamental y acaben con los sofismas con los que se intenta confundir a la población.
- Detener nuevos intentos de imponer la ideología de género y proponer leyes que promuevan la inclusión sin confusión.
- Proteger la integridad de la constitución, de los organismos autónomos y de los procesos democráticos que hemos logrado construir en nuestro país.
- Prepararnos para un diálogo constructivo entre los ciudadanos y los gobernantes que privilegie nuestras verdaderas inquietudes por encima de los intereses particulares.
En el siguiente artículo continuaremos exponiendo lo que podemos hacer los ciudadanos ante el escenario político que se viene en los próximos años: cómo podemos incidir y ejercer una ciudadanía más proactiva. Estemos atentos para que no nos tomen por sorpresa las acciones de los nuevos funcionarios electos y las iniciativas que propongan, sobre todo las relacionadas con la protección de los derechos fundamentales. Observemos con cuidado la actuación de nuestros diputados federales y, en general del Congreso de la Unión.
ConParticipación.
Fuentes:
[2] https://www.excelsior.com.mx/prep2021/ine/
[3] https://www.eluniversal.com.mx/elecciones/morena-y-aliados-pierden-la-mayoria-calificada
[4] http://www.diputados.gob.mx/bibliot/publica/otras/diccjur/dic%20m.htm#a3
http://sil.gobernacion.gob.mx/Glosario/definicionpop.php?ID=152
http://sil.gobernacion.gob.mx/Glosario/definicionpop.php?ID=154
